Conversaciones sobre el fanzine francés, primera parte.

sábado, 24 de mayo de 2008

Una calurosa tarde de mayo me reúno con los fanzineros Yann y Apsara, organizadores del festival Fanzinat World, en el bistro Aux Chiffons para charlar de forma distendida e informal sobre los fanzines franceses y sus diferencias con sus homólogos españoles.

Un hecho llamativo sobre la escena editorial independiente francesa es que funciona mediante redes de información bien organizadas y diferenciadas principalmente en cuatro categorías: manga (cómic de estilo japones), música, cómic franco-belga e ilustración (graphzines). Debido a esta fuerte categorización es muy difícil organizar eventos exclusivos de fanzines (que al igual que en España son extremadamente raros) de manera que haya una muestra de las diferentes escenas. En alguna ocasión en la que se ha conseguido reunir fanzines manga y de cómic franco-belga en un mismo espacio, los asistentes estaban totalmente divididos por una barrera psicológica insalvable… Veamos entonces algunos rasgos de cada escena.

Hace unos 15 años el manga todavía no había desembarcado realmente en Francia, y por tanto los fanzines de aquel tiempo se dedicaban principalmente a reseñar los tomos publicados en Japón. Debido a esta falta de acceso a la fuente original, algunos fanzines comenzaron entonces a crear sus propios cómics para proveer a los lectores. Tras la llegada masiva de títulos japoneses al país galo, los fanzineros empezaron a copiar el estilo y argumentos de los mangakas más conocidos, y sus fanzines empezaron a venderse más que los que tenían un estilo original (salvo honrosas excepciones). Sin embargo, el volumen de venta no es especialmente alto, siendo incluso más rentable vender chapas y postales en los salones, y es por ello que no hay muchas posibilidades de profesionalización por esta vía.

Un caso bien diferente es el de los fanzines musicales, que no son muy numerosos, pero que suelen estar muy bien enfocados para cubrir una escena en concreto. La estrategia de éstos consiste en inscribirse en el depósito legal y conseguir una distribuidora a nivel nacional hasta empezar a venderse en los kioscos, gracias a su gran tirada. Ésta es la manera como han surgido algunas revistas musicales francesas de hoy en día (lo siento, perdí los ejemplos en el hilo de la conversación).

Continuará en el siguiente artículo…

4 COMENTARIOS:

milady dijo...

Vaya, veo que los franceses están mucho más organizados que nosotros. Aunque me da la impresión que los fanzines franceses no tienen ese toque de publicación "casera" y reparto entre colegas que tienen la mayoría de fanzines que vemos por akí. A mí es ése punto un poco cutre lo que me gusta de un fanzin, como algo surgido de forma expontánea y casual. Aunque me quito el sombrero ante algunos de los fanzines que nos has enviado que tienen unos dibujos de gran calidad (las historias lo sabré cuando me las traduzcan jeje)
Y nada más, gracias por su colaboración una vez más mister Teknad y un par de besos pa París.

Anónimo dijo...

Es curioso: conversando con otro amigo me dice que lo que menos le gusta de la mayoría de los fanzines parisinos es que sus autores publican cosas muy poco trabajadas bajo el pretexto de la estética fanzinerosa. Es decir, que el espíritu de "¡Ale, vamos a hacer un fanzine!" no ha muerto, pero habría que ver cuáles son los resultados...

A mi personalmente me gustan los fanzines que estan bien currados aunque sea con pocos medios, pero es difícil encontrar muestras de ese equilibrio.

Besitos a la Monstrua.

gatao dijo...

Con tus aportaciones voy a aprender mas del mundo del fanzine de lo que podia imaginar. Observo- corrigeme si me equivoco- que es un mundo muy variado, bastante complejo y un tanto desestructurado. Contiene una gran riqueza de la que poco a poco nos vas haciendo participes. Gracias.

Anónimo dijo...

Efectivamente, es un mundo complejo y cambiante difícil de apreciar en su totalidad, ya que poca relación tiene un fanzine fotocopiado sobre la escena punk local con uno artístico super bien editado de una universidad , aparte de quizás unos objetivos y ganas de creación comunes. Ni siquiera mis amables interlocutores estaban de acuerdo en todos los puntos, lo que he escrito aquí es una síntesis muy general a partir de un montón de anotaciones sueltas cogidas al vuelo, ya que aún no soy capaz de hacer entrevistas en toda regla en francés :D En cuanto conozca a más gente de este mundillo espero poder ir afinando estos rasgos generales, consiguiendo pieza a pieza una visión más completa del conjunto.