Tao Te King

jueves, 17 de enero de 2008



XVII

El Maestro eminente es ignorado por el pueblo.
Luego viene aquel a quien el pueblo ama y loa.
Después aquel al que teme.
Y al fin aquel al que desprecia.

Si el maestro no tiene mas que una confianza
insuficiente en su pueblo,
este desconfiara de el.

El Maestro eminente se guarda de hablar
y cuando su obra ha sido consumada y su tarea cumplida,
el pueblo dice: "Esto viene de mi mismo."

LAO TSE

1 COMENTARIOS:

el gato con bota dijo...

Me recuerda al Nietzsche de "Así habló Zaratustra", a aforismos de maestro y profeta, a la sabiduría de la calma y del paseo, a la mirada suave pero penetrante hasta el alma.