"LA SEMILLA DEL DIABLO" de Roman Polanski, 1968

Querid@s camaradas, esta noche nos sumerguiremos en los misteriosos e inmeroriales caminos del terror psicológico, los miedos subconscientes, la paronoia, la obsesión, el ansia de poder y la llegada del mismísimo Anticristo, que más que un simplista "triunfo del mal" y "fin del mundo" que el cristianismo nos ha vendido durante siglos, para mí representa una especie de revelación y rebelión cósmico-espiritual por todo el mal e hipocresía que el hombre lleva gastando durante siglos contra sus semejantes, la naturaleza y el universo mismo. . .

"Considerada como una de las mejores películas de terror de todos los tiempos, esta brillante adaptación de la novela de Ira Levin (autor también de "Bésame antes de morir" y "Los niños del Brasil" fallecido hace apenás unos meses), es la historia de una joven pareja neoyorkina que espera su primer hijo. Al igual que otras madres primerizas, Rosemary (Mia Farrow) siente confusión y miedo. Su marido (John Cassavetes), un ambicioso actor sin éxito, hace un pacto con el diablo, quien promete hacerle llegar a la cumbre. El director, Roman Polanski, logra que su esplendido reparto ofrezca actuaciones extraordinarias. Ruth Gordon, obtuvo el Oscar a la mejor actriz secundaria por su interpretación de vecina entrometida en este terrorífico clásico"
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"La semilla del diablo", es una variante narrativa del mito faústico, pero al mismo tiempo es uno de los primeros ejemplos del cine conspirativo de la postmodernidad. Es la alegoría de una sociedad capitalista y competitiva en la que se es capaz de cualquier cosa para conseguir las únicas metas aceptadas: el éxito, el dinero y el poder.
(extraido del libro "La gran conspiración" de Gregorio Parra, Celeste Ediciones, 2001)

Esta obra maestra del cine de terror se considera la precursora inmediata del "cine satánico" que se abrirá paso en la década de los 70 con otras obras maestras como "El exorcista" y "La profecia". Su influencia sobrepasó lo meramente cinematográfico ya que su rodaje y sobre todo su impacto en el público quedó marcada por varias "anécdotas" de lo más impactantes y terroríficas, pero esta vez en la vida real. Se dice que el personaje del Demonio fue interpretado por Anton La Vey (otras versiones lo niegan, aunque era un hecho que este personajes se había convertido en un icono popular sobre todo en ambientes artísticos en los años 60), conocido "papa negro" fundador de una iglesia satánica. La habitación donde se rodó parte de la película fue la misma que John Lennon ocupó durante sus últimos días en el famoso Hotel Dakota de Nueva York. Y por último se dice que Charles Manson se obsesionó tanto por la película por desvelar el mensaje satánico al mundo que instigó a sus acólitos a asesinar a Roman Polanski, cosa que no pudieron hacer, porque al asaltar su casa, el director estaba de viaje. Sin embargo su esposa Sharon Tate, embarazada de ocho meses y cuatro invitados fueron macabramente asesinados en un extraño ritual de sangre, demencia y drogas. Pero este episodio de Charles Manson y su grupo conocido por "La familia" daría para escribir mucho. Influenciados por teorías apocalípticas, el rock and roll y las drogas este grupo cometió en el lapso de pocos días varios asesinatos de parecidas características que han quedado rodeados de misterios y sobre los que se han dado diferentes versiones y motivaciones. Desde los que ven a este grupo como una panda de delincuentes drogados, los que ven una secta de visionarios místicos que en sus excesos lisérgicos intentaron hacer su propio "juicio final", y los que ven en ellos a unos pobres jipis con un buen potaje mental de teorias y drogas que fueron utilizados e infiltrados por los servicios secretos estadounidenses para desprestigiar el mundo de la contracultura. Como introducción al tema podeís pinchar aquí.